La continuación del relato puede tomar cuatro caminos. Primero: la mujer duda, no dice nada y sigue mirando la película. Segundo: la mujer le dice que sí, que por amor sería capaz de eso y mucho más, y sigue mirando la película. Tercero: la mujer le dice que no, que una cosa es estar casada con un tonto y otra muy distinta estarlo con un asesino, y sigue mirando la película. La cuarta es la que tiene más posibilidades: ella le pregunta a su vez: "¿Y tú? ¿Qué harías si te dijera que esta mañana he matado a tu amante?".
J.N.P.